domingo, 31 de enero de 2010

Juramento de los Caballeros de Colón

 "Juramento de los Caballeros de Colón"

Publicado por Jaime Salvador López Rocha
"Yo . . . En presencia del Todopoderoso Dios, de la bienaventurada Virgen María, del bienaventurado San Juan Bautista, de los Santos Apóstoles San Pedro y San Pablo, de todos los Santos, sagradas huestes del cielo, y de ti, mi Santísimo Padre, el Superior General de la Sociedad de Jesús, fundada por San Ignacio de Loyola, en el Pontificado de Pablo III, y continuada hasta el presente, por el vientre de la Virgen María, la matriz de Dios y el cayado de Jesucristo, declaro y juro que Su Santidad, el Papa, es Vice regente de Cristo y que es única y verdadera cabeza de la Iglesia Católica o Universal en toda la Tierra; y que en virtud de las llaves para atar y desatar dadas a Su Santidad por mi Salvador Jesucristo, tiene poder para deponer Reyes herejes. Príncipes, Estados, Comunidades y Gobiernos y destruirlos sin perjuicio alguno.

Por tanto, con todas mis fuerzas defenderé esta doctrina y los derechos y costumbres de Su Santidad, contra todos los usurpadores heréticos o autoridades protestantes, especialmente de la Iglesia Luterana de Alemania, Holanda, Dinamarca, Suecia y Noruega y ahora de la pretendida autoridad e Iglesia de Inglaterra y Escocia, y de las ramas de la misma, establecidas en Irlanda y en el Continente Americano y de todos los adherentes a quienes se considera como herejes y usurpadores, enemigos de la Santa Madre Iglesia de Roma”.

“Renuncio y desconozco cualquier alianza, como un deber, con cualquier Rey hereje, Príncipe o Estado, llámese protestante o Liberal y la obediencia a cualquiera de sus Leyes, Magistrados u Oficiales”.

“Declaro, además, que las doctrinas de Inglaterra y Escocia, de los Calvinistas, Hugonotes, y otros de nombres protestantes o Masones son condenables, y todos los que no las abandonen”.

“Declaro, igualmente, que ayudaré, asistiré, y aconsejaré a todos y cualquiera de los agentes de Su Santidad, en cualquier lugar donde esté, ya sea en Suiza, Alemania, Holanda, Irlanda o América, o cualquier otro reino o territorio a donde vaya y haré todo lo que pueda para extirpar las doctrinas heréticas, protestantes o masónicas y para destruir a todos los pretendidos poderes legales y de cualquier clase que sean”.

“Prometo y declaro, no obstante que me es permitido pretender cualquier religión herética con el fin de propagar los intereses de la Madre Iglesia, guardar el secreto y no revelar todos los consejos de los Agentes, según sus instrucciones y a no divulgarlos directa ni indirectamente por palabras o escritura o de cualquier otro modo, sino a ejecutar lo que se ha propuesto y encomendado, y a lo que se me ordene por medio de ti, mi Santísimo Padre, o por cualquiera de esta Sagrada Orden”.

“Declaro, además, y prometo que no tendré opinión, ni voluntad propia ni reserva mental alguna; que como un cadáver obedeceré incondicionalmente cada una de las órdenes que reciba de mis superiores en la Milicia del Papa y de Jesucristo”.

“ Que iré a cualquier parte del mundo a donde se me envíe, a las regiones frígidas del Norte, a los espesos montes de la India, a los centros de la civilización de Europa o a las silvestres cabañas de los bárbaros salvajes de la América, sin murmuración o queja; y seré sumiso a todo lo comunicado”.

“Prometo y declaro que haré, cuando la oportunidad se me presente, guerra sin cuartel, secreta y abiertamente, contra todos los herejes, Protestantes, Masones, tal como se me ordene hacer, extirparlos de la faz de la Tierra, y que no tendré en cuenta ni la edad, sexo o condición, y colgaré, quemaré, destruiré, herviré, desollaré vivos a estos infames herejes.

Abriré los estómagos, los vientres de sus mujeres, y con las cabezas de sus infantes daré contra las paredes a fin de aniquilar a esa execrable raza.

Que cuando esto no pueda hacerse abiertamente, emplearé secretamente la copa de veneno, la estrangulación, el acero, el puñal o la bala de plomo sin tener en consideración, el honor, rango, dignidad ó autoridad de las personas, cualquiera que sea su condición en la vida pública y privada, tal como sea ordenado en cualquier tiempo por los Agentes del Papa o el Superior de la Hermandad del Santo Padre, de la Sociedad de Jesús”.
“Para todo lo cual consagro mi vida, alma y todos los poderes corporales, y con la daga que recibo ahora suscribiré mi nombre con mi sangre en testimonio de ello, y si manifestare falsedad o debilidad en mi determinación, pueden mis hermanos y mis soldados compañeros de la Milicia del Papa, cortar mis manos y mis pies y mi cuello de oreja a oreja. Protesto abrir mi vientre y quemar azufre en él y aplicarme todos los castigos que se puedan sobre la Tierra, y que mi alma sea torturada por los demonios del Infierno para siempre”.

“Que daré mi voto siempre por uno de los Caballeros de Colón con preferencia a un protestante, especialmente a un masón y que haré que todo mi partido haga lo mismo; que si dos católicos están luchando, me convenceré quién defiende más la Santa Madre Iglesia, y daré mi voto por él”.

“No trataré ni emplearé a un protestante si está en mis facultades tratar o emplear a un católico. Colocaré a una señorita católica en familias protestantes, para que semanariamente rinda informes de los movimientos familiares de los herejes”.

“Que me proveeré de armas y municiones a fin de estar listo cuando se me dé la orden o me sea ordenado defender la Iglesia, ya como un individuo o en la Milicia del Papa”.

“Todo lo cual yo juro por la bendita Trinidad y el bendito Sacramento que estoy para recibir, ejecutar y cumplir este Juramento”.

Tomado del semanario "Iconoclasta" publicado en Guadalajara, Jalisco, México.

Denuncian participación del Opus Dei en golpe de Estado en Honduras


Miembros del Opus Dei habrían participado en el golpe de Estado contra el presidente de Honduras, Manuel Zelaya, dio a conocer un estudio que acusa a la Iglesia Católica de aspirar a anular el Estado laico.

Miembros activos del Opus Dei de Honduras, grupo de la Iglesia católica, participaron en el Golpe de Estado del pasado 28 de junio contra el presidente constitucional del país, Manuel Zelaya, según un
estudio difundido hoy aquí. "El Opus Dei en Honduras", "La Iglesia católica en el Golpe", es el estudio elaborado por el sociólogo Marco Burgos y que informa de la participación de este grupo en la política de este país, pese a que de manera oficial Honduras es un estado laico.
"En Honduras el Opus Dei está encabezado por el cardenal Oscar Andrés Rodríguez", precisa el documento de Burgos, al referirse al líder espiritual de los católicos hondureños, que son la mayoría de la
población.

El estudio de Burgos, denuncia cómo esta rama de la Iglesia católica está en varias instituciones, y menciona en forma directa a la vicecanciller, Marta Lorena Alvarado, y al alcalde de Tegucigalpa, Ricardo Alvarez, entre otros.
El sociólogo también menciona en esa organización religiosa al ex candidato presidencial del gobernante Partido Liberal, Elvin Santos.
"Podemos asegurar que el Opus Dei aspira a anular el Estado laico y crear en Honduras un Estado regido por su propia moral y visión fundamentalista del mundo", citó el análisis de Burgos.
El prelado católico en ningún momento ha denunciado la violación a la Constitución al sacar a Zelaya del país y al contrario ha bendecido la acción mediante la cual se quito a Zelaya de la presidencia el 28 de
junio de 2009. La Constitución Política de Honduras prohibe que sus nacionales sean sacados del país, como ocurrió con Zelaya.
En Honduras, además del Opus Dei, son parte activa de la política las iglesias evangélicas que también apoyaron el derrocamiento del presidente constitucional.
El Consejo Nacional Anticorrupción tiene como coordinador general al pastor evangélico, Osvaldo Canales, miembro activo de los sectores opuestos a Zelaya. "Después del Golpe de Estado, hay unos grupos religiosos que operan en la clandestinidad en la política, como el Opus Dei y las iglesias evangélicas", dijo a Notimex el ex canciller Ernesto Paz Aguilar.
Indicó que tanto la Iglesia católica, como la evangélica buscan en especial tener incidencia en la Salud y la educación, distorsionando en ambos sectores sobre todo la educación sexual.